Hola, papá:
Te escribo esta carta para decirte que te quiero. Si soy así de sincera y directa es porque últimamente no nos hemos entendido muy bien y no quiero más malentendidos. Te quiero porque eres mi padre, porque siempre me has cuidado, me has protegido y me has dado todo cuanto tenías.
Así que no te preocupes si últimamente estamos distanciados. Es cierto que me he alejado, porque no sé cómo hacerte entender que ya no soy esa niña a la que necesitas proteger de todo peligro. Es cierto también que yo tengo poca paciencia para tu incomprensión, pero te sigo queriendo igual que siempre.
También te escribo para pedirte perdón si acaso no cumplí tus expectativas, si te he defraudado o si esperabas más de mi. Pero sinceramente creo que hiciste un buen trabajo y lo siento si no entendí todo como querías. En cualquier caso, te pido perdón porque te sigo necesitando cerca.
Y después del perdón viene el agradecimiento por haberme enseñado todo, por haberme entregado todo y por haber puesto tu vida y tu tiempo a mi disposición. Nunca podré agradecerte suficientemente el amor que me has dado, porque a pesar de nuestros últimos desencuentros, siempre me he sentido querida.
Te quiero, papá.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario